Riz Ahmed interpreta a Malik Khan, un exmarine que, después de varios viajes a zonas de guerra, vuelve a casa y se entera de un siniestro secreto: una especie alienígena de insectos se está apoderando de los cuerpos de las personas con apariencia normal... La invasión Critica: sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia..... La invasión
Ambientada varios años después de la película original, "Legacy" presenta a un grupo de jóvenes exploradores que quieren revelar los secretos de un área que no sale en los mapas y está protegida por una valla electrificada. Sin embargo, cuando llegan al centro del lago descubren una isla en la que vive un depredador ansioso por devorar a aquellos que han ignorado las advertencias. Mandíbulas 6: El legado Critica Sexta y última entrega hasta la fecha de la prolífica saga de cocodrilos iniciada con la entretenida Mandíbulas (Steve Miner, 1999), que dirige en esta ocasión el responsable de títulos como The Lullaby (2017), y que está protagonizada por Katherine Barrell (The Scarehouse, 2014), y Joe Pantoliano (Matrix, 1999). Ambientada varios años después de la película original, "Legacy" presenta a un grupo de jóvenes exploradores que quieren revelar los secretos de un área que no sale en los mapas y está protegida por una valla electrificada. Sin embargo, cuando llegan al centro del lago descubren una isla en la que vive un depredador ansioso por devorar a aquellos que han ignorado las advertencias. Esta sexta entrega tiene algunos puntos superiores a las anteriores secuelas de la saga, con unos efectos digitales, que aunque continuan siendo horribles, resultan un tanto mejores que a lo que nos tenían acostumbrados, y un guión, que sobre estar limitado a poco más que su sinopsis, ofrece cierta tensión argumental. Salvo lo anteriormente mencionado, estamos ante otra entrega más de Mandíbulas, con todo lo que esto conlleva, malas actuaciones, diálogos penosos, y un comportamiento para la criatura antagonista que resulta todo menos natural, pretendiendo dar explicación a esto último. Mandíbulas 6 resulta en otra entrega más que poco tiene que se pueda rescatar, y aunque entretendrá a aquellos que como un servidor han pasado un buen rato con las películas de la saga, no se escapa de ser una propuesta de serie B bastante mala. Mandíbulas 6: El legado
Pese a haber gozado de gloria y de premios en su pasado, un luchador (Jake Gyllenhaal) ha caído en desgracia. Sin embargo, no se ha rendido y ha tomado la decisión de mejorar su imagen por el bien de su mujer y su hija. Revancha Critica: Hay una y muy sencilla razón por la que merece la pena hablar de Southpaw. Si esa razón no existiera, esta enésima película de boxeo y redención podría pasar desapercibida entre tantas y similares historias que nunca alcanzarán, jamás, ese vuelo épico y poético que tenía la gran obra maestra del género (Toro Salvaje), a la que tantas otras han intentado acercarse (Million Dollar Baby, The Fighter, Ali…). Esa razón, sin la cual Southpaw probablemente no merecería la pena, no es su director, Antoine Fuqua, que siendo un director funcional, no destaca en su carrera por un enfoque especialmente original o novedoso en sus historias (la más destacada es Training Day, y en su currículo cuenta con cintas tan rutinarias como Olympus has fallen, El Rey Arturo, Lágrimas del Sol). Inicialmente prevista como un vehículo al servicio de Eminem (del que se conserva un tema musical que acompaña un soberbio montaje sobre el entrenamiento del protagonista), que funcionase como metáfora del aciago camino personal del rapero; Southpaw encontró en su desarrollo la verdadera razón de ser de su historia: un protagonista que hace creer que nos encontramos ante una buena película. Revancha No quiero decir que Southpaw sea mala, ni mucho menos. Consigue no caer en la sensiblería a pesar de buscar constantemente la redención de su protagonista. Consigue ser entretenida, e incluso emocionante, a sabiendas de que conocemos prácticamente cada giro de su guión desde el gran incidente que ocasiona la trama. Y en los combates de boxeo, Fuqua coloca y mueve la cámara de forma tan eficiente que por momentos consigue situar al espectador en el ring, y resultar impresionante no sólo en la sangre y los golpes, filmados tan bien que parecen reales, sino en una detallada exposición de la técnica del boxeo desde una posición estratégica. Revancha Dicho todo esto, lo que de verdad importa de Southpaw es su protagonista, su personaje, su actor; el genio de Jake Gyllenhaal. Después de interpretaciones tan buenas como las que ha mostrado en los últimos años en End Of Watch, Prisioners, Enemy, y sobre todo, Nightcrawler, este actor, camino de convertirse en uno de los mejores del actual cine americano, retrata aquí a un hombre básico y roto, enamorado (de una Rachel McAdams de la que podría decirse lo mismo que de su compañero: su creación es extraordinaria, y su energía perdura en la película incluso cuando no está en pantalla; además de que True Detective y Spotlight van camino de convertirla en otro esencial del momento) y solo, capaz de cargar con toda la energía trágica de esta historia y de convencernos de que merece la pena verla, capaz de hacernos sentir compasión por una mole de músculos que portan tanto sentimiento, tanto dolor, y tantos detalles que hacen de su interpretación, una verdadera clase de genialidad, fuerza y capacidad de transformación. Revancha
Nobita viaja con Doraemon al pasado para reencontrarse con su abuela, ya fallecida en el presente. Secuela de la película «Stand by Me Doraemon» y a su vez, remake del mediometraje «Doraemon: Obāchan no Omoide»... Stand By Me Doraemon 2 Critica: que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia..... Stand By Me Doraemon 2
Armado solamente con una palabra, Tenet, el protagonista deberá luchar por la supervivencia del mundo entero y evitar la Tercera Guerra Mundial, en una historia de espionaje internacional. La misión se desplegará más allá del tiempo real. No son viajes en el tiempo, es inversión. Tenet Critica La peli empieza fuerte, con una escena de acción trepidante muy estilo Nolan, en la que no entendemos un carajo de lo que está pasando, pero no importa, es el principio, ya nos lo explicarán más adelante. Sin embargo, más tarde lo que ocurre son una serie de diálogos de metafísica cuántica y de agujeros espacio temporales, que me dejan aún más confundido. Todo lo que saco en claro es que hay unas balas que van del revés. Decido ser paciente, al fin y al cabo es una peli de Nolan, es normal que sea algo compleja pero seguro que al final me entero de la trama y merece la pena. No es así, la trama se va embrollando más y más, en una sucesión de escenas de acción y diálogos sin mucho fuste. Le pongo un poco de voluntad, intento recordar mis conocimientos de física del instituto…Sin embargo, mi instinto me dice que necesitaría un doctorado en Física para llegar a enterarme de algo. Llega un momento en que me duele la cabeza y pienso que he pillado el coronavirus, pero no, es por el esfuerzo de mi cerebro intentando descifrar el galimatías de guión. Después de una hora de metraje ya casi pierdo la esperanza de que la peli me enganche. Miro el móvil aburrido, algo que nunca hago en el cine. Al final ya no me importa si matan a la chica o no o si el universo se retrotrae y estalla en cien mil pedazos, sólo estoy deseando que se acabe este bodrio de película. Lo peor de todo llega cuando me meto en Filmaffinity y veo que tiene un 8 y pico de puntuación. No suelo escribir críticas pero esta vez me siento obligado. Nolan es un gran director, ha hecho grandes películas. Memento y Origen por ejemplo son dos grandes películas, las dos son una rallada del copón, las dos te hacen pensar mucho y que te devanes los sesos, pero merece la pena el esfuerzo. Dentro de su complejidad están bien explicadas, y además la historia te atrapa y eres capaz de empatizar con los personajes. Esto no pasa en "Tenet". Los personajes son planos y mal construidos, sus aspiraciones, deseos, metas y miedos me importan un carajo. No logro conectar con ellos. Y el guión es insufrible, mal hilado, mal explicado, aburrido, y demasiado pretencioso. Esas ansias de grandilocuencia y verborrea dialéctica pedante la convierten en una soberbia mierda. Lo peor es que es una película que se dirige al intelecto, a la razón, así que no se la puede exculpar y decir que hay que experimentarla sin más, como si fuera una película surrealista de David Lynch. No, porque además tres cuartas partes de la película son diálogos sobre mecánica cuántica y física nuclear, que tienen como supuesto objetivo explicar la trama. Si la peli fuera toda acción y efectos especiales podría olvidarme de darle un sentido. Si fuera poética, si apelara a los sentimientos o buscara provocarme sensaciones con imágenes poderosas, sí, por qué no, podría disfrutar del espectáculo y no me importaría que no me entere de la misa la mitad. Pero en este caso, como he dicho, la peli no cesa de dirigirse al intelecto y a la razón, así que si no logras comprenderla es un fracaso como película, y si después de varios visionados la logras descifrar creo que sería algo así como devanarte los sesos con un puzzle complicadísimo para acabar formando no la Torre Eiffel, el Coliseo o algo bonito, sino una gran mierda. Y a mí señores, no me merece la pena devanarme los sesos para eso. Tenet
Thor es un arrogante y codicioso guerrero cuya imprudencia desata una antigua guerra. Por ese motivo, su padre Odín lo castiga desterrándolo a la Tierra para que viva entre los hombres y descubra así el verdadero sentido de la humildad. Cuando el villano más peligroso de su mundo envía a la Tierra a las fuerzas más oscuras de Asgard, Thor se dará cuenta de lo que realmente hace falta para ser un verdadero héroe. Thor Critica: Hace mucho tiempo que Marvel Studios encontró una fórmula casi indestructible para adaptar a sus famosos héroes a la gran pantalla. Protagonista conocido arropado por unos secundarios apetitosos, presupuesto desmesurado, sentido del humor muy blanco y que la historia no moleste mucho. Así surgieron las franquicias de Iron Man, Spider Man, X-Men, Fantastic Four o Hulk, por citar solo algunas de sus muchas adaptaciones. Mismas pautas, desiguales resultados en taquilla por lo que, si es necesario, se recurre al reset de la saga como ha ocurrido con el film protagonizado por La Masa. Misma suerte correrán en breve el Hombre Araña y los mutantes. La cinta que nos ocupa, Thor, no es una excepción, convirtiéndose así en un producto realizado y destinado para consumo rápido, muy cuidado visualmente pero carente de alma, profundidad y, paradojicamente para tratarse de El Hombre de Hierro, de fuerza. Thor Decía Spielberg que el público sale contento de la sala si le proporcionas un gran arranque y un gran final, obviando el nudo de la historia. El libreto de Mark Protosevich procura que así sea pero los primeros minutos ya dejan constancia de lo que nos espera en el resto del metraje: un humor blanco como la nieve, un protagonista con el que es arduamente complicado identificarse y una estructura previsible y poco trabajada. El prólogo no impresiona ni despierta interés alguno. Es más, desde ese momento, hasta el espectador menos avispado puede discernir que va a ocurrir. Las referencias visuales a El Señor de los Anillos no hacen más que recordarnos la brillantez de la saga dirigida por Peter Jackson y lo impersonal que luce el universo localizado en Asgard. Thor