Detroit, 1995. La promesa de potencia industrial se ha transformado en un hervidero de conflictos económicos y raciales. La 8 Mile Road, que recorre el perímetro de la ciudad, marca ahora la frontera entre lo urbano y lo suburbano; entre lo blanco y lo negro. Allí, hay una larga tradición de creatividad negra. Ésta ha tenido siempre unas raíces obreras y ha expresado sin filtros su dura realidad. En los clubs, los mejores raperos se enfrentan en duelos verbales para conseguir el respeto de sus colegas. 8 Mile Critica: 8 Millas retrata una semana en la vida de un joven blanco de los suburbios de Detroit cuya mayor afición es el rap. La cinta, que está ambientada en 1995, tiene un claro contenido biográfico (Eminem ayudó en la elaboración del guión) y muestra la cruda realidad de las barriadas de una gran ciudad americana en clave de drama urbano. Nos guste o no, este es el film de claro contenido hip hop más importante y exitoso de todos los tiempos. La película podrá tener sus fallos, pero es evidente que el rap tiene una importancia enorme en ella y es el proyecto comercial que mejor ha mostrado la escena “underground” estadounidense hasta la fecha. 8 millas En el plano artístico, se puede echar en falta un guión algo más elaborado, que no sirva sólo para lucimiento de su flamante protagonista, o una mejor interpretación de los actores (la capacidad dramática de Eminem no va acorde con sus dotes líricas), pero el director Curtis Hanson (L.A Confidential) consigue construir un ambiente realista y muy propicio para la historia que relata; además, para cualquier amante del rap resulta cuando menos interesante observar las entretenidas batallas entre los mc’s que trufan gran parte del metraje y suponen el clímax del film (en el dvd, podemos ver las “rap battles” en versión extendida, con pequeñas joyas tanto por parte de Eminem como de sus oponentes). 8 millas Aparte de todo esto, hay que resaltar una excelente banda sonora en la que aparecen canciones de Mobb Deep, Notorius B.I.G., Wu Tang Clan o Outkast, además de los temas que se idearon expresamente para el film, con canciones de D-12, Jay-Z, X-Zibit (que, por cierto, aparece en 8 Millas en una corta pero divertida escena) o el propio Eminem, que ganó el Oscar a mejor canción por “Lose Yourself”. 8 millas
Otoño 2015. Dos socorristas, Oscar (Eduard Fernández) y Gerard (Dani Rovira), viajan hasta Lesbos (Grecia) impactados por la fotografía de un niño ahogado en las aguas del Mediterráneo. Al llegar descubren una realidad sobrecogedora: miles de personas arriesgan su vida cada día cruzando el mar en precarias embarcaciones y huyendo de conflictos armados. Sin embargo, nadie ejerce labores de rescate. Junto a Esther (Anna Castillo), Nico (Sergi López) y otros miembros del equipo, lucharán por cumplir un cometido, dando apoyo a personas que lo necesitan. Para todos ellos, este viaje inicial supondrá una odisea que cambiará sus vidas. Mediterráneo Critica: El nuevo trabajo de Marcel Barrena, responsable de "100 metros (2016)", es una película basada en una historia real, la de Óscar Camps, el socorrista que decidió arriesgar su vida acudiendo a la isla griega de Lesbos para salvar a inmigrantes, y que posteriormente fundaría la ONG Open Arms. El proyecto lleva unos cuantos años de gestación, en donde el cineasta se ha embarcado en varias misiones de esa asociación humanitaria. El largometraje se presentó en la pasada edición del Festival de San Sebastián formando parte de la proyección de una de las galas de RTVE, y ha sido una de las tres elegidas por la Academia del cine español para representar a nuestro país en la lucha por el Óscar 2022 en la categoría de película internacional. La película no funciona, pese a que el punto de partida es atractivo, ya que está llena de tópicos del género dramático, no logra emocionarme pese a la dureza de lo que nos pretenden contar y, reconociendo su gran nivel a nivel técnico en apartados como el sonido y los efectos visuales, el guion y el desarrollo de la trama no dejan de ser una Tv-Movie con un trasfondo de denuncia social. Sus casi dos horas se hacen bastante pesadas, y se desaprovecha a intérpretes como Anna Castillo, Álex Monner o Sergi López, cuyos personajes carecen de fuerza ni del interés necesario. A nivel interpretativo todo el peso recae en Eduard Fernández, que lo hace bastante bien, además de que me parece un acierto su elección por su parecido físico con Óscar Camps, y un Dani Rovira que saca adelante un personaje como el de Gerard en un registro diferente a lo que nos tiene acostumbrado el actor español (una de las excepciones es su actuación en "100 metros", la anterior película del director). Las escenas en el interior del mar Mediterráneo están bastante bien filmadas, pero funcionan como situaciones aisladas. La música compuesta por Arnau Bataller es excesiva en esas situaciones dramáticas, y el desenlace es un poco precipitado. Mediterráneo Me esperaba algo más de esta película, pero estoy seguro que gustará a los aficionados a estos dramas con denuncia social inspirados en hechos reales. Durante los títulos de crédito finales escuchamos el tema "Te esperaré" compuesto y cantado por María José Llergo, que tiene muchas opciones de nominación a los Goya, y que sirve como acompañamiento a las imágenes de los personajes reales. LO MEJOR: La calidad en algunos aspectos técnicos como el sonido. LO PEOR: Es una película llena de tópicos. La música que subraya en exceso las situaciones dramáticas. Mediterráneo
Narra la historia de Javier Muñoz, un ejecutivo publicitario de éxito, que tras un año en el paro, él y su familia se ven obligados a dejar el piso que ya no se pueden permitir. Un día, Javier descubre que aún conserva un juego de llaves de su antiguo piso y empieza a espiar a la joven pareja que ahora vive allí. Poco a poco, Javier empezará a infiltrarse en la vida de los nuevos propietarios, decidido a recuperar la vida que ha perdido… aunque eso signifique destruir a quien se ponga en su camino. Hogar Critica: Acabo de ver la película y sigo sin dar crédito. Es como un telefilme de sobremesa en A3, pero más ridículo si cabe. Al menos la factura técnica no es de serie B. Solamente eso y los protagonistas, Javier Gutiérrez y Mario Casas, mantienen un mínimo de dignidad en el metraje. Hogar Todo lo que esperas que pueda pasar, pasa. Y todos los clichés, uno tras otro, se suceden hasta un clímax final ridículo y absurdo. Hay tantos ejemplos, a cada cual más sangrante, que si hubiese tomado un chupito cada vez que acertaba lo que pasaría en la siguiente escena no me tendría en pie de la borrachera. Reconozco que siempre esperaba equivocarme. Un poco en plan "no se atreverán, no; habría que tenerlos cuadr...". Pues se atreven. ¡Vaya que sí! Si no querías taza, pues taza y media. Hogar Y es que nada se sostiene en la trama. Todos está llevado al exceso, por lo que a media película solo esperas que, al menos, le den un giro que salve los muebles, pero éste no llega. En vez de eso, más madera. Y si todo esto fuera poco, si ya pensabas que no podría ser peor, te escupen a la cara un epílogo que provoca tanta vergüenza ajena que, si al final no te tiras por la ventana, es porque toca estar confinado en casa. Hogar
Después de sobrevivir a un accidente automovilístico que le quitó la vida a su novio, una adolescente cree que él está intentando reconectarse con ella desde el más allá....Entre la vida y la muerte Critica: humanos que vuelve confuso lo cotidiano y nos hace desconfiar tanto de lo que vemos como de lo que sentimos; una fotografía innovadora y sugerente, llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia...... Entre la vida y la muerte
En mayo de 1940 el destino de Europa occidental depende del primer ministro británico Winston Churchill, quien debe decidir si negociar con Adolf Hitler o luchar sabiendo que podría significar una derrota humillante para Gran Bretaña y su imperio. Darkest Hour oscuras Las horas Critica: Así se percibía a sí mismo Churchill antes de ser nombrado primer ministro; así era percibido por el rey de Inglaterra, por su propio partido y por buena parte de la población. El desastre de Gallipolli y ciertas acciones que llevaron a la muerte por fuego de varios anarquistas lo pusieron en solfa, así como sus actitudes hacia las huelgas mineras debido a la ojeriza que tenía a los sindicatos anarquistas, socialistas y comunistas. Pero era el único que, a parte de Hallifax, podía tolerar la oposición cuando se descabeza a Chamberlain. oscuras Las horas La película parte en este punto y termina con el salvamento de Dunquerke. Entre tanto, podemos disfrutar de una fotografía maravillosa que remarca los claroscuros al más puro estilo de Rembrandt o Velázquez; de una banda sonora correcta y de una cinemática que tiene sus momentos más logrados en los discursos en el Parlamento. oscuras Sin embargo, lo más destacable son las palabras y quien las pronuncia, pues fueron sus discursos (según la película, no según la Historia), las que hiceron del 'Never Give Up' ("No rendirse jamás") casi un lema nacional. Y es Gary Oldman el que se mimetiza con el personaje, tanto en dicción (asomboroso cómo lo hace. Por favor, vedla en versión original), en lenguaje corporal y en expresión facial aún bajo las extensas capas del oscarizable maquillaje. Magnífico. Lo borda en la que, creo, es la mejor actuación de los últimos quince años. oscuras Las horas Y con Oldman es mucho decir.
La historia se centra en Mio, una chica que está preocupada porque su amigo de la infancia no corresponde a sus sentimientos. Después de una pelea trivial entre los dos y durante un día lluvioso, Mio sufre un accidente de tráfico y cae inconsciente. Al despertar se encuentra con un misterioso mundo del que nunca había escuchado o leído…..Kimi wa Kanata Critica: llena de claroscuros y contrastes, que nos engulle como un torbellino y nos escupe despojos hediondos a cada fotograma; una escenografía espeluznante que desdeña lo efímero y encumbra lo sintético y alambicado. Es decir, en cuanto al universo visual nos hallamos ante una propuesta insólita, apabullante y portentosa, llena de matices y aciertos.Sin embargo, las flaquezas y deficiencias acaban por erigirse en las grandes protagonistas de la función. Un metraje tan desmesurado como innecesario (sobra casi toda una hora), alargando las escenas hasta la inanición y la abulia; una historia tan poco carismática y tan porfiadamente vaporosa que hacedesfallecer el ánimo y obliga a esperar a que la próxima escena rescate del tedio al espectador y haga avanzar la trama hacia algún lugar digno de interés, cayendo siempre en subrayados innecesarios y en tópicos previsibles, ahogando toda ambigüedad y anulando cualquier estímulo. La calma y el reposo casan mal con una supuesta cinta de acción, por muy ensimismada y reflexiva que pretenda ser. Y las cavilaciones sobre la vida, la muerte, los milagros de la existencia y la magia de la procreación resultan tan patosas como primitivas, tan superficiales como chirriantes.Hay algunas escenas aisladas que descuellan y deslumbran, dignas de perdurar en la memoria cinéfila (como, entro otras, ese baile erótico que sobrepone a dos personajes en abigarrado aquelarre de lo imposible o ese ‘nacimiento’ brusco y sin remilgos de una replicante abocada a su exterminio), pero son momentos inconexos y solitarios, que impresionan por su esplendor y singularidad, pero desentonan por carecer de engarce y coherencia... Kimi wa Kanata