7.9
Basada en un hecho real ocurrido en 1850, narra la historia de Solomon Northup, un culto músico negro -y hombre libre- que vivía con su familia en Nueva York. Tras compartir una copa con dos desconocidos, Solomon descubre que ha sido drogado y secuestrado para ser vendido como esclavo en el Sur en una plantación de Louisiana. Renunciando a abandonar la esperanza, Solomon contempla cómo todos a su alrededor sucumben a la violencia, al abuso emocional y a la desesperanza. Entonces decide correr riesgos increíbles y confiar en la gente menos aparente para intentar recuperar su libertad y reunirse con su familia. 12 Years a Slave 12 añosCritica:Es complicado realizar una crítica objetiva después de las más de dos horas de injusticia y comportamiento indignante que ofrece esta "12 años de esclavitud". Sin duda son estas películas las que nos recuerdan el sentido y significado de ser humano, porque dejan una huella indeleble acerca de como el hombre puede perder su total humanidad siendo esclavizado y esclavizando. 12 añosCiertamente no es la primera película que trata el tema de la esclavitud en Estados Unidos, pero sí que es una de las pocas que lo retrata sin tapujos, sin adornos, sin suavizar nada, porque es muy dura tanto en sus planteamientos como en sus formas (esas torturas a base de golpes, palizas y latigazos son sencillamente brutales), y además es de las pocas que trata el tema desde el punto de vista de un afroamericano libre y culto, que es engañado, drogado y secuestrado para trabajar como esclavo (Chiwetel Ejiofor realiza sin duda el papel de su carrera y sería sorprendente que no se llevara el oscar este año). A través de los ojos de su personaje, Solomon Northup, asistimos a un cruel espectáculo pre-guerra civil en el que el tiempo parecía detenerse en las plantaciones de algodón, mientras seguía avanzando en el resto del mundo. 12 años esclavoPero si el papel de Chiwetel Ejiofor es muy bueno, el de Michael Fassbender es sencillamente intensísimo y también tiene que merecerse algún tipo de mención en forma de premio o nominación por ese esclavista psicótico-lascivo que tiene unas idas de olla impresionantes. Su interpretación, sobre todo en el momento del castigo a latigazos, produce tal odio e indignación que sabes que estás asistiendo a una gran interpretación. Aunque, para ser sinceros, es una de esas películas en las que todo el reparto está a niveles sobresalientes, ya sea en papeles más extensos (como el de Fassbender o el de su parteneire Sarah Paulson que hace de dama sociópata de apariencia y gesto amable), o en papeles más cortos (el vendedor de esclavos de Giamatti, el esclavista con conciencia que interpreta Cumberbatch, el capataz de Paul Dano, o las cuatro escenas del constructor canadiense que interpreta Brad Pitt). 12 años